martes, 10 de junio de 2014

Ricardo Halabí: “Hay que volcar el Frente de Profesionales al mundo social”

De los 12 mil militantes que había en el Frente de Profesionales del PDC, sólo podrán sufragar un poco más de mil en los próximos comicios que se realizarán el fin de semana, protestó el candidato de la lista 2, Ricardo Halabí, dejando fuera a destacados personeros cuya condición profesional nadie puede negar.
Todo ocurrió porque a petición de una de las listas, a última hora se pidió un refichaje general de los profesionales adscritos al Frente, a quienes se les exigió enviar copias de sus certificados de títulos, trámite que la inmensa mayoría no alcanzó a realizar.
Pero Halabí no se queda en la queja. Hablando con un tono enérgico, sin olvidar la molestia por la discriminación que se está haciendo con ese nuevo padrón, sigue avanzando con su programa de gobierno. Y para eso, dice que hay que volcar el Frente de Profesionales al mundo social, respaldar técnica y programáticamente al Gobierno de Bachelet, contribuir al enriquecimiento de su programa y que los profesionales tengan una voz importante en la DC.

 

¿Los profesionales DC, en la mayoría de los casos, están comprometidos realmente con las políticas que impulsa el Partido o más bien están alejados o adormecidos?
La mayor parte de los militantes del partido sólo concurre a votar, porque sólo se les llama a votar. Hay militantes que no conocen otra tarea dentro del partido que no sea ir a votar. Nosotros queremos volver al partido de camaradas, donde cada militante tiene participación e injerencia en las decisiones del partido.

¿Cuáles son entonces los ejes de su programa de gobierno?
Para nosotros, el principal desafío que tenemos por delante es recuperar el partido democrático, participativo, dialogante y respetuoso de sus normas, que nos hizo grandes ante el país. Por eso, lo primero que haremos será restablecer el registro histórico de militantes, el imperio del Estatuto y el funcionamiento de sus instancias de decisión.

¿No están muy marginados de la sociedad civil?
Lo segundo, será volcar la acción organizada del Frente hacia el mundo social, a fin de tener una presencia activa en la sociedad civil y en los movimientos sociales. Y lo tercero, será apoyar sin reservas, con nuestra capacidad de elaboración técnica y programática, al gobierno de la Presidenta Bachelet y a la acción de la Nueva Mayoría en el Parlamento, en las regiones y en los municipios.

¿El que haya tantas “sensibilidades” al interior del Partido es indiferente a su lista, es algo inocuo? ¿Esto no produce fricciones innecesarias?
Quienes nos integramos a esta lista estuvimos en el pasado en opciones distintas y, a veces, confrontadas. Nunca habíamos visto un grado de fricción tan intensa entre el partido y el gobierno del que forma parte. Y cuando pierde un gobierno progresista son los más pobres los que pierden. Esta grave coyuntura que enfrenta el partido, nos ha persuadido de aligerar el peso de las divergencias y de poner el acento en el futuro, en las esperanzas y realizaciones que anhelamos para la Democracia Cristiana. Y por eso, porque queremos poner el énfasis en el porvenir, porque queremos darle cuerpo al Partido, es que nos hemos unido tras esta alternativa.

¿De qué manera en estas listas se refleja la adhesión a los programas de Gobierno? ¿Es conveniente casarse con ellos, o es mejor mantener una cierta distancia?
La Democracia Cristiana está comprometida con el programa de gobierno de la Presidenta Bachelet. Por consiguiente, el éxito de este gobierno, y de su programa, es el éxito de la Democracia Cristiana y de los profesionales y técnicos del partido.

¿Aunque haya algunas diferencias?
Nuestra tarea es redoblar los esfuerzos para fortalecer el gobierno y contribuir al enriquecimiento de su programa.

¿Está de acuerdo con el refichaje que se hizo de los profesionales DC para que puedan votar, o ha servido para marginar a algunos militantes que no alcanzaron a realizar el trámite?
Nosotros defendimos en todas las instancias internas y hasta agotar todos los medios, el derecho de los militantes inscritos en el padrón histórico del Frente, que es el mismo registro vigente en la elección de noviembre de 2010, y el mismo empleado en las sucesivas elecciones primarias internas del partido. La mesa nacional del partido rechazó este antecedente y llevó el caso al Tribunal Supremo que le dio la razón, con lo que fueron suprimidos de una sola vez 11 mil de los más de 12 mil militantes empadronados que perdieron, así, su derecho a votar el próximo domingo.

¿Piensa que hay que repotenciar los núcleos profesionales dentro de la DC o hay que extinguirlos por representar intereses sectoriales muy parcializados?
No sólo vigorizaremos esas instancias orgánicas. Constituiremos unidades técnicas especializadas de carácter permanente, y abiertas al debate y a la elaboración de propuestas e iniciativas de la militancia.

Pero hay que incentivar a que se integren…
Crearemos espacios de integración y de participación para los jóvenes titulados de universidades, institutos profesionales y centros de formación técnica, y para aquellos jóvenes que están en vías de serlo, a fin de vigorizar y renovar el trabajo del Frente. E impulsaremos una fuerte política de incorporación de profesionales mujeres, especialmente jóvenes, a las tareas y responsabilidades del Frente.

¿Qué piensa de la actual ley de colegios profesionales y de qué manera habría que trabajar al interior del partido para repotenciarlos?
Hemos afirmado que nos daremos una organización interna que responda tanto a las necesidades de los colegios profesionales y sus tradiciones de servicio a Chile, como asimismo a las nuevas realidades emergentes que nos revela el mundo del trabajo especializado.

¿No es que los frentes de profesionales están muy alejados unos de otros…?
Para eso, constituiremos Frentes de Profesionales regionales y provinciales, y organizaremos encuentros periódicos de diálogo con las autoridades de gobierno y realizaremos eventos macro-regionales (norte, centro y sur) que permitan una mejor articulación y coordinación de propósitos

¿Los profesionales de la DC deberían continuar con una actitud marginal dentro del partido o elaborar programas sectoriales que deberían ser apoyados por los senadores y diputados en el parlamento?
Generaremos vínculos de apoyo y trabajo común con parlamentarios, autoridades del gobierno central, gobiernos regionales y municipios, así como con las instituciones donde profesionales y técnicos hacen su contribución al país.

Después los parlamentarios no los toman en cuenta…
Procuraremos, que el Frente de Profesionales desempeñe un rol activo tanto en la organización, como en la elaboración de contenidos y debates del Congreso Nacional de la Democracia Cristiana, para lo cual convocaremos, muy especialmente, a todos quienes han manifestado una vocación permanente por la reflexión doctrinaria.

LA PARADOJA DEMOCRATACRISTIANA

La casa de la Democracia Cristiana en Alameda frente al cerro Santa Lucía.
Rodolfo Fortunatti

El próximo domingo miles de democratacristianos concurrirán a sus sedes comunales para renovar la totalidad de la junta nacional del partido. Después de su congreso ésta es la máxima instancia de decisión de la colectividad. En los más de 500 representantes que la conforman, entre delegados y presidentes regionales, comunales, de frentes y departamentos, recaen las principales decisiones políticas de la tienda.

La Junta decide desde cuestiones estratégicas, como la postura DC ante las reformas impulsadas por Michelle Bachelet, hasta la política de alianzas, como su permanencia en la Nueva Mayoría o su virtual giro hacia un pacto de centroderecha con Renovación Nacional y Fuerza Pública.

Es un momento de definiciones. Y no sólo porque en agosto la actual conducción cumplirá cuatro años al mando del PDC — cerrando con ello el paréntesis transicional abierto por Sebastián Piñera—, sino porque precisamente ahora es cuando se produce la mayor fricción entre el partido de la «revolución en libertad» y el gobierno para el «Chile de todos», hecho que sacude fuertemente la memoria militante. El 4 de septiembre se conmemoran cincuenta años del triunfo de Eduardo Frei Montalva y del primer gobierno democratacristiano de América, cuyas elocuentes credenciales de centroizquierda la mesa de Walker ha procurado borrar sin éxito de la identidad falangista.

¿Aparente paradoja? Más bien la muy evidente contradicción entre el etos progresista del movimiento político y una dirigencia que ha actuado a contrapelo suyo y sin ofrecer debate ni explicaciones. Porque fue esta directiva la que anunció que no habría comunistas en el gabinete, pero los hubo. Ella la que nombró acuerdo político a lo que todo el país vio como una coalición. Ella la que celebró con exultante optimismo el programa de gobierno que critica al unísono con la oposición. Y ella la que cerró filas en torno a las facultades presidenciales y que lamenta no estar suficientemente representada en el gabinete.

Si está por irrumpir un nuevo ciclo político, no será con la resistencia de la Democracia Cristiana, sino con su resuelta y activa participación. Pero esta definición pasa por la elección que tendrá lugar el fin de semana en todo el país.

http://www.labatalla.cl/la-paradoja-democratacristiana/