sábado, 26 de noviembre de 2016

LA DEMOCRACIA CRISTIANA Y EL FUTURO DE CUBA




Oswaldo Payá Sardiñas, La Habana, Cuba, 29 de febrero de 1952 provincia de Granma, 22 de julio de 2012.



1. Ha muerto Fidel Castro, líder de la revolución de 1959 que puso fin a la dictadura de Fulgencio Batista y despertó la solidaridad de los pueblos libres y soberanos de América Latina.

2. Ha partido quien tras esa acción revolucionaria marcó la vida de los últimos 57 años del pueblo de Cuba, periodo en que la isla sufrió un efectivo bloqueo de parte de Estados Unidos, al tiempo que fue actor de primer orden en la Guerra Fría entre el Occidente capitalista y el Este comunista liderado por la ex Unión Soviética.

3. Estas circunstancias externas, sumadas a las propias de un régimen político que restringió las libertades públicas, suprimió el pluralismo propio de una democracia representativa, y cuyo Estado emprendió transgresiones no deseables internacionalmente en contra de los derechos humanos de los opositores; limitaron las oportunidades de progreso y bienestar del pueblo cubano.

4. Con el deceso de Fidel Castro concluye una época y se abre una nueva etapa en que llamamos a poner fin al bloqueo económico contra Cuba y a poner todos los esfuerzos en iniciar, a través de una transición política gradual y dialogante, un proceso democrático en que se reconozcan las libertades y se fortalezcan los derechos económicos, sociales y culturales.

5. En este día recordamos la lucha de Oswaldo Payá, líder del Movimiento Cristiano de Liberación y de miles de cubanos, que pese a la opresión y siempre por la vía no violenta se la jugaron incansablemente por una Cuba libre y democratica. Guardamos la esperanza de que sus hijos puedan ver su sueño hecho realidad como nosotros pudimos verlo en Chile.

6. La Democracia Cristiana, como lo ha venido haciendo permanentemente, seguirá contribuyendo a la paz, la justicia y la solidaridad del hermano pueblo cubano.

Santiago, 26 de noviembre de 2016.