miércoles, 30 de enero de 2008

A la luz del mensaje del maestro Castillo

Documento en formato pdf

Camaradas, amigas, amigos:

Son bien sabidos los conflictos internos de nuestro partido en los últimos meses. Sobre ellos y las propuestas para superarlos hemos entregado algunas líneas de trabajo que nos parece útil reiterar:

1. Asumir las conclusiones del Congreso como nuestro gran faro de navegación y nuestra mayor fuerza interior;

2. Construir sobre esas ideas la unidad del Partido;

3. Buscar una fórmula de acuerdo que permita generar una mesa integrada e integradora que incluya todas las visiones internas sobre la estrategia a desarrollar por la Democracia Cristiana;

4. Reiterar que la Concertación, en un plano de colaboración y mutuo respeto, constituye nuestro proyecto político; y

5. Poner de manifiesto en todas nuestras actitudes, ante la deserción de algunos militantes, la fraternidad para quienes se han mantenido en el Partido, el respeto para quienes lo han abandonado y la claridad y fuerza para responder cuando se nos ataca de manera soez. En el tiempo del verano es bueno reflexionar sobre estas ideas y muchas otras. En el intertanto, nos permitimos hacerle llegar un documento que Jaime Castillo nuestro gran maestro, escribió hace ya muchos años en una dificultad similar para la Democracia Cristiana. Es antiguo pero siempre vigente. Está vigente porque atañe a nuestra esencia. Se los hacemos llegar con nuestra mayor fraternidad.


Renán Fuentealba Moena / Mariano Ruiz-Esquide Jara /
Ricardo Hormazábal Sánchez / Jorge Donoso Pacheco /
Alejandra Miranda Olivos / María Rozas Velásquez /
Jorge Consalez Carvajal / Héctor Gárate Wamparo /
Rodolfo Fortunatti Molina / Ignacio Balbontín Arteaga /
José Soto Sandoval / Juan Guillermo Espinosa C. /

Santiago, enero 29 de 2008.